Elaborando estrategias para el desarrollo integral de la Iglesia es un tema sumamente importante; tan importante que me atrevería a hacer la declaración siguiente: Dicho tema aborda un asunto que es de vida o muerte en la vida ya sea de una iglesia local, un grupo de iglesias e inclusive una denominación como grupo social. (No importa que el proceso de muerte dure treinta, cincuenta o cien años). Gracias a Dios, no es así con la Iglesia como cuerpo de Jesucristo cuya cabeza es el Señor. Ella nunca está condenada al fracaso. Ella va con paso firme hacia el triunfo final.
Publicación de reflexión teológica y pastoral del Seminario Nazareno de las Américas